jueves, 19 de abril de 2007

Desesperación


Este monstruo que traigo adentro me devora día a día.
El dolor, la falta de aire, se perdió mi alegría.
Esta opresión que siento en el pecho ya no me deja respirar.
Por favor alguien ayúdeme, no me puedo levantar.
Voy cayendo por un túnel que parece infinito.
Y por más fuerte que lo haga, no escucho ni mi propio grito.
Parece ser que estoy perdida, será porque mi rumbo se perdió.
Todo lo que conocía como mi vida, en un abrir y cerrar de ojos desapareció.


1 comentario:

César P dijo...

Me pasa lo mismo. No te preocupes que todo esto de vivir la vida no es mas que una gran broma de Dios.