Esta el la triste historia de una niña con el corazón roto.
Ella amó a un niño, del cual hoy sólo le queda una foto.
Se conocieron desde un tiempo atrás.
Juntos eran siempre felices, como supondrás.
Fueron tantos años los que pasó a su lado.
Le entregó todo su cuerpo, todo su ser, más, no le pudo haber dado.
Peleas y amores siempre los hubo.
Hasta que un día, él dudas tuvo.
La dejó, triste y desconsolada.
La dejó sola y desconcertada.
Pero él regresó, tiempo después.
Pidiendo perdón por su estupidez.
Ella confundida, y con mucha razón.
No sabía si hacerle caso a su cabeza o a su corazón.
-Ya estarás bien- todos decían.
Pero lo que sentía por dentro no lo sabían.
Con palabras de amor hicieron un trato.
Jugando con fuego siguieron un rato.
Besos ocasionales, caricias con miedo.
Pero ella por dentro dijo –No puedo-
Aún lo amaba y verlo dolía.
Porque aunque estaba a su lado, ya no lo tenía.
-Por qué ya no me ama, por qué ya no me quiere?-
-Ya no es cierto que sin mí él se muere?-
-Por qué pasa esto?- se preguntaba.
Olvidarlo quería, o eso intentaba.
Ya no podía, estaba muy harta.
Con miedo y tristeza le escribió una carta.
Diciendo hasta siempre, diciendo adiós.
Los que antes eran uno, ahora son dos.
Lloraba por las noches, fingía por el día.
Ella solo buscaba un poco de alegría.
Hasta que un día su alma se quebró.
Y diciéndole adiós, ella lloró.
Si alguna vez te hice daño, perdóname, no fue mi intención.
Yo sólo quería amarte por y para siempre, pero el destino me jugo una traición.
Ella amó a un niño, del cual hoy sólo le queda una foto.
Se conocieron desde un tiempo atrás.
Juntos eran siempre felices, como supondrás.
Fueron tantos años los que pasó a su lado.
Le entregó todo su cuerpo, todo su ser, más, no le pudo haber dado.
Peleas y amores siempre los hubo.
Hasta que un día, él dudas tuvo.
La dejó, triste y desconsolada.
La dejó sola y desconcertada.
Pero él regresó, tiempo después.
Pidiendo perdón por su estupidez.
Ella confundida, y con mucha razón.
No sabía si hacerle caso a su cabeza o a su corazón.
-Ya estarás bien- todos decían.
Pero lo que sentía por dentro no lo sabían.
Con palabras de amor hicieron un trato.
Jugando con fuego siguieron un rato.
Besos ocasionales, caricias con miedo.
Pero ella por dentro dijo –No puedo-
Aún lo amaba y verlo dolía.
Porque aunque estaba a su lado, ya no lo tenía.
-Por qué ya no me ama, por qué ya no me quiere?-
-Ya no es cierto que sin mí él se muere?-
-Por qué pasa esto?- se preguntaba.
Olvidarlo quería, o eso intentaba.
Ya no podía, estaba muy harta.
Con miedo y tristeza le escribió una carta.
Diciendo hasta siempre, diciendo adiós.
Los que antes eran uno, ahora son dos.
Lloraba por las noches, fingía por el día.
Ella solo buscaba un poco de alegría.
Hasta que un día su alma se quebró.
Y diciéndole adiós, ella lloró.
Si alguna vez te hice daño, perdóname, no fue mi intención.
Yo sólo quería amarte por y para siempre, pero el destino me jugo una traición.
1 comentario:
olvidar, tal vez. recordar, por siempre. nunca llorar. sonreir. respirar...
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